domingo, 28 de febrero de 2010

Con el alma en los labios



Guardo, Conservo, Atesoro, Mantengo, Recolecto

Guardo en mi corazón una estrella roja de papel fabricada por un ángel.
Conservo en mi mente una corona blanca de cartulina que me dio una reina.
Atesoro en mis ojos un dibujo pintado con tinta negra trazado con magia pura.
Mantengo en mi alma un rostro desconocido la proeza más apasionante.
Recolecto en mi espíritu tu nombre en secreto, ángel, reina, magia pura, rostro desconocido, la proeza más apasionante.

Recuerdos

Recuerdos pedazos memorables de penas, desengaños y alegrías.
Dulces y preciados recuerdos, hazañas y derrotas.
Recuerdos que interminablemente se han convertido en un pasado agradable y deseado.
Aquel pasado que jamás deseo olvidar.
Pasado que estoy tratando de dejar para abrir paso a un presente más resplandeciente y a un futuro del cual esperaré sorpresas inimaginables y eternas.

Con el Alma en los Labios



Te quiero yo tanto,
que nunca he podido
Llegar a explicarme,
cuál es la razón.
Parezco el lamento
de un pájaro herido
que busca la sombra
de tu corazón.
Si tú me quisieras
como yo te adoro
el séptimo cielo
sería de los dos.
Por eso a tus plantas
tu cariño imploro
igual que un milagro,
se implora de Dios
Y al sentir que me quema
esta ansiedad febril,
con el alma en los labios
te vuelvo a decir
Si tu me quisieras como yo te quiero
por toda la vida no
habría de quedar amor
para nadie en el mundo entero,
ni sobre la tierra ni abajo del mar.
Y al sentir que me quema
esta ansiedad febril,
con el alma en los labios
te vuelvo a decir
si tú me quisieras como yo te quiero
por toda la vida no
habría de quedar amor
para nadie en el mundo entero
ni sobre la tierra ni abajo del mar

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